2009

He aprendido este año.

Música

A veces la música me coge de sorpresa, y aunque en realidad me esté yendo todo mal, aunque esté de mal humor y el panorama pinte bastante mal; aunque no pueda aguantar más... Me hace feliz... a su manera.

24 de Diciembre (y muchos días atrás)

Me he acostumbrado a pensar que voy a cambiar las cosas. Me he pasado tanto tiempo dandole vueltas a lo que supone, que al final es como si me hubiese convencido de que es lo que va a pasar. No se si es una estupidez, se que es lo que me pide el cuerpo, y nada más.

20 de Diciembre.

Es posible que vuelva otra época de esas en las que me da por escribir lo que me pasa por la cabeza... Puede que otra vez esté apunto de volverme loco, y cuando apenas me quede aire, quizá vuelva a respirar, sin saber muy bien por qué, ya que es algo que sólo depende de mí. Perdonad que escriba de forma tan abstracta, pero hay cosas tan mías, que no pueden salir de mí, aunque quieran hacerlo. Y hoy, estoy a punto de perder este pulso. Aún así, se que lo volveré a ganar. De cualquier manera, no se si debería dejarme ganar... y salir ganando.

Gracias

Me encanta ver que, aunque algunas veces las cosas no vayan bien, siempre, pensar en los buenos momentos y en las cosas que me ilusionan, consigue alegrarme. Y es gracias a todos los que me hacen sonreír. Gracias.

La calle

Humo

Cambiar

Septiembre es un mes de empezar cosas, pero los que vamos con calma empezamos a empezar en octubre. A mi me gusta empezar, porque eso significa cambiar. Espero seguir empezando cosas y seguir cambiando poco a poco, siempre a mejor. Y, seamos sinceros, en este momento tengo muchas cosas de las que puedo estar contento. Entre ellas un millón de recuerdos.

Vaya novedad.

Que caos somos las personas. Tan pronto nos sentimos la persona más feliz y relajada como la más amarga. Sin motivo aparente y muchas veces por cosas de las que ni siquiera somos conscientes. Que se puede hacer para evitar esto? Pues ahora mismo no se me ocurre.

Uno mismo

En este momento de mi vida me doy cuenta del proceso que hemos pasado para llegar a ser quienes somos hoy, y para tener cada uno nuestra propia personalidad.

Según hacemos nuestra vida y conocemos las distintas situaciones, vamos dándonos cuenta de cómo somos, y al hacernos preguntas en todas esas situaciones aclaramos cual es nuestra manera de ver la vida. Para ser feliz tienes que tratar de ser fiel a tu propio sentimiento, y hacer todo lo que sintamos y nada de lo que no comprendemos.

Yo he llegado a la conclusión de que en realidad no nos hacemos más complejos con los años, sino que simplificamos todo lo que hay en nuestra cabeza para entendernos mejor. Es como si llegasemos a la descripción más sencilla de nosotros mismos, o lo que llaman "principios" (aunque me suena muy raro y no me gusta llamarlo así). Es decir, que según vas viviendo, encuentras cual es tu ley interna, cual es tu prioridad en la vida. Como en una sola palabra. Y eso es lo que somos, y cada uno es distinto. Es como un sentimiento, no es algo que se pueda decir con una palabra, pero es esa cosa que llevamos dentro que nos hace tomar las decisiones que tomamos y ser como somos.

Cada día voy viendo más claro cual es esa descripción simple de mi mismo, y encuentro gente más parecida a mi. Y no volvería atrás un sólo día, porque cada uno que pasa, voy siendo capaz de encontrar más facilmente las cosas que me hacen feliz, y de disfrutar más de la gente que es como yo.

El mar

Que grande es el mar... es mas grande que una casa o un autobús. Por lo menos mide 100.000 metros.

Ir por ahí

No se sabe muy bien por que, un día aparecemos en este mundo y a lo largo de nuestra vida sabemos que vamos a vivir en él. Es curioso, desde pequeños tenemos la sensación de que lo que conocemos es "el mundo" como si fuera todo lo que hay, aunque en realidad sabemos bien que es sólo una parte minúscula de todo lo que podemos conocer. Lo que quería decir es que tengo muchas ganas de conocer todo el mundo, o más bien, como son todos "los mundos" que existen en el planeta, ver qué vidas existen en el mundo... Pero no lo puedo escribir tan bien como querría porque la tele no me esta dejando concentrarme. Esque se me mezclan los anuncios de neumáticos con las cosas que quiero decir.

Anuncios

Los anuncios de seguros para el coche son bastante estúpidos! Por qué todos cantan? no hace falta! en serio! a mi no me convence ninguno de todas formas! Los anuncios deberían ser mas sencillos... Algo como: Contrata nuestro seguro; es el mejor.

Chocolate amargo

Tiene los ojos de chocolate amargo... Y en ellos puede leerse todo salvo sus pensamientos. Si fijas en ella tu mirada te verás perdido en la oscuridad cálida de sus ojos marrones. La infinitud construida de destellos y sombras, un cielo abierto en el espacio de sus pupilas, y la noche en su interior. En ellos siempre estas en peligro. En peligro de no volver a salir, por no querer hacerlo.

Berlín Capítulo cinco

Andando tranquilamente cerca de la puerta de Brandenburgo, algo inesperado captó mi atención… A lo lejos vi que se acercaba una extensa comitiva, y pensé que habían decidido adelantar la cabalgata de reyes, pero cuando se acercaron lo descarté. Era Junio. Y el aspecto no me cuadraba. Fue curioso, colorido y lleno de cosas extravagantes. Todos muy contentos y muy orgullosos, excepto un señor, al que llamaremos Günter, que se subió por error a una carroza, por confundirla con la línea circular de autobús.

Berlín Capítulo cuatro

Una de las cosas que llaman la atención es que en esta ciudad es que la gente va en bici a todas partes. Todo está lleno de bicis: hay bicis en la calle en las tiendas en los tejados las alcantarillas en los sánwiches... en todas partes hay bicis. Es que en en Berlín hay muy poco tráfico incluso en el centro de la ciudad, y como es tan llano, es muy cómodo moverse como hace el individuo que vemos en la foto superior, al que llamaremos Günter.

Berlín Capítulo tres

Berlín! Es genial la sensación de saber que tienes un millón de cosas de ver, la cámara preparada y que todo lo que encuentres va a ser nuevo! Puestos a descubrir como es la vida en la capital de Alemania me dispongo a empezar por lo más urgente en aquel momento: Comer. Comer siempre es bien recibido en mi vida. Que es lo que se come en Berlín? Pues salchichas. Y que es lo que se bebe? Pues cerveza (no muy fría). Así es como empieza mi estancia, con un currywurst y una cerveza no muy fría. En una especie de cafetería en la calle "Unter den Linden"

Berlín Capítulo dos

Hacía años que no subía en un avión de líneas, y ya tenía ganas de volver a ver todo desde tan alto… El vuelo duró alrededor de dos horas y tres cuartos, y no pasó nada relevante; no nos cayó un rayo, no se nos cayó un ala ni nos atacaron de ninguna forma, así que todo fue bastante normal. Por cierto, el piloto no nos dijo nada, ni nos deseó buen vuelo. Yo creo que estaba enfadado por el café que sabía a ceniza. Llegamos al aeropuerto de Tegel, en Berlín (bastante cerca del centro de la ciudad, dentro de lo que fue la zona interior del muro). Es bastante pequeño si lo comparas con el de Madrid. Cuando llegamos a la cinta esa que da vueltas con maletas, estuvimos esperando a que saliese el comandante sentado en ella para saludarnos mientras daba vueltas. Hubiese sido un bonito gesto, pero prefirió no hacerlo. Que pena.

Berlín Capítulo uno

Si te levantas a las cinco y media de la madrugada, seguramente ese sea el momento más duro del día. Para poder conseguirlo hay que tener un buen motivo. Y Viajar a un sitio tan lejano por primera vez en la vida es bastante motivador. De todas formas madrugar tiene dos cosas buenas: La primera es que aprovechas más el día, y la segunda que a las 6 de la madrugada todo es mucho más bonito. Hacía mucho tiempo que iba al aeropuerto, y la nueva terminal 4 es impresionante. Lo que más me gustó es estar allí tan pronto, y poder ver amanecer a través de aquellas cristaleras tan enormes, mientras me tomo un café que sabe a ceniza y un dónut sabor cartón glaseado. Aunque eso me dió igual. Andar por un sitio tan grande y tan vacío con la luz naranja que hay a las siete de la mañana hace que te sientas relajado.

Llueve en Madrid

Vamos!

Yo aspiro a liberar todo lo que llevo dentro, a sacar el máximo partido a mi forma de ser, viviendo tan feliz como sea posible! Quiero desarrollar todo mi potencial, ser tanto como pueda. Y todo en términos de sentirme bien, de reírme, de disfrutar, vivir la vida con una sonrisa de oreja a oreja... en definitiva, con ilusión, que es felicidad. Y la felicidad es la meta que tengo. Todo está para servirla. Dedícate a reírte! Dedícate a hacer planes, a ponerte metas, a estar con la gente con la que te diviertes, y a liberarte de todo lo que te pese! Vamos! Te espera tu vida!

Yo que se

Vaya, hace tiempo que no escribía nada, pero es que hay temporadas de pensar más o pensar menos... Bueno, en realidad siempre se piensa igual, lo que pasa es que te concentras en cosas más tontas. Piensas en jamón cocido, en cartuchos de tinta, en sillas de plástico... Cosas que a lo mejor a la gente no le interesan tanto, y por eso no las escribo. Aunque podría experimentar; a lo mejor descubro que todos llegamos a las mismas conclusiones en esos temas poco trascendentales. La concusión más importante a la que he llegado estos días es que dormir sienta bastante bien, y que los cumulonimbos producen fuertes precipitaciones a menudo en forma de granizo. (Eso es muy útil saberlo).

Fotos a la venta!

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Relatividad

Menos mal que todo es relativo! Así las cosas pueden ser importantes o irrelevantes según nos apetezca!

Pensamiento inconexo

Lo que llevas dentro es mucho más grande de lo que puedes entender. Es más bonito de lo que los ojos pueden ver. Aunque tu no te des cuenta, es algo que se puede ver desde fuera. Es paradójico que los demás puedan ver más claro que tu lo que hay dentro de ti. No lo sospechas. Ni te das cuenta.

Perderme

Voy andando por calles desconocidas para mí, o que vagamente recuerdo, y no me importa perderme. A penas hay pensamientos que me ronden, y me siento en paz, en ningún sitio. No me preocupa nada. No soy nadie en una cuidad tan grande, y menos mezclado entre las corrientes de las calles pequeñas, sin saber a donde ir, sin horarios, sin destino. Sólo quiero seguir andando, buscar una imagen, una sensación que quiera fotografiar. Y aunque pase el tiempo, y las vidas sigan, tan perdido como estoy, nada puede afectarme. No me importa perderme.

Inspiración

Puedes levantarte una mañana y sentir una extraña sensación que te anima a vivir, a crear, a comocer... Puedes sentir que hay algo dentro de ti que quiere ser expresado, y descubrir mil ilusiones latentes que casi habías olvidado... Sentir que tu vida es mucho en potencia... Todo en lo que se puede convertir. Eso es lo que yo llamo sentirse inspirado.

Un descanso

Hoy me apetece contradecirme. Vale ya de hacer tantas teorías sobre la vida. Hoy me apetece improvisar.

De un segundo vistazo

La gente suele desesperarse cuando intenta conseguir ser feliz llenando su vida de grandes cosas, y muchas veces llega a la conclusión de que la felicidad es un bien escaso, y no todos tienen la suerte de poder aspirar a ella. Yo creo que la vida está llena de felicidad, pero las personas, con ese afán tan extraño de complicarnos la vida, la vamos a buscar a los sitios más raros... ¿Sabes qué? La felicidad está dentro de nosotros. Si, ya la tenemos, lo que pasa es que no sale así como así. Necesita pequeñas cosas que la van liberando poco a poco. ¡Pequeñas cosas! Exacto; son cosas que están al alcance de cualquiera, y estamos tan acostumbrados a ellas que no las vemos. Las pequeñas cosas que nos ilusionan. La ilusión es la clave. Si lo piensas bien, la felicidad no es tener cosas, sino estar ilusionado por algo que aún no es, pero será, o puede llegar a ser una realidad. Es ese pequeño periodo de tiempo de espera, es como la noche de reyes. Las cosas pequeñas son tan sencillas que ni siquiera podemos tener miedo de que desaparezcan. Por eso son un buen lugar para poner nuestra ilusión.

Detras de lo que hacemos...

Sigue sorprendiéndome todo lo que tiene que ver con los sentimientos. De un día para otro podemos cambiar nuestra visión del mundo radicalmente, podemos cambiar de opinión y transformarnos... Podemos mirar una misma realidad y sentir cosas opuestas, y , sin embargo, seguimos siendo los mismos. O no. Sobre esto no hay nada claro. Sólo se puede decir que los sentimientos pueden dominarnos hasta el punto de hacernos cometer estupideces. Pueden hacer que actuemos en contra de nosotros mismos, aunque seamos conscientes de que lo que hacemos no va a tener buenas consecuencias. Qué listo es el corazón, que es capaz de engañar a nuestra cabeza, que es la que se supone que lleva las riendas... Pues no! Yo creo que la cabeza va después que el corazón. Me refiero a que está ahí para servirle; Busca la manera más eficaz de cumplir los deseos que él tenga. Por mucho que nos digan, no hacemos nada que no sintamos. No se puede luchar contra un sentimiento. Puede que a veces tengamos la sensación de actuar en contra de lo que sentimos, pero no es cierto. Luchamos contra una realidad que no nos gusta, contra una situación que nos incomoda, pero simpre lo hacemos guiados por un sentimiento, por una sensación, llámalo como quieras. No lo podemos evitar, somos así. Los humanos somos unos románticos.

Dejar una huella.

Siempre he sentido la necesidad de crear. Y creo que todos tenemos ese deseo. Quiero hacerme oir para transmitir algo bueno a la gente. Quiero transmitir tantas cosas que no pueden decirse con palabras... Si pudiera, la gente me conocería mucho mejor y podría entenderme. No habría lugar a dudas. Ojalá pudiesemos dejar pasar a nuestra mente al resto de la gente. Si en algún momento siento algo que me emociona; una canción, un pensamiento, una imagen que me traiga a la memoria esos misteriosos recuerdos falsos... siento la necesidad de hacer que los demás también lo disfruten. Mi objetivo es hacer algo bonito en la vida, algo para los demás.

Creo que empezaré por escribir cosas interesantes.

Hago lo que puedo!

Me doy cuenta de que siempre envidiamos a alguien, siempre queremos más! ¿Por qué no nos contentamos nunca con lo que tenemos?
No es que no estemos contentos o que no lo apreciemos, el problema es que nuestra cabeza pide siempre una dosis de preocupación. No me preguntes por qué, sé que va en contra de lo que queremos, pero si no nos preocupa no saber qué camino elegir, nos preocupará el euribor o el color de nuestras zapatillas... Vamos, que siempre hay alguna cosa. Cuando empiezan las vacaciones ya nos estamos preocupando porque queda menos para que se acaben... Así somos.
De esto nos damos cuenta cuando perdemos algo importante. ¡Siempre pensamos que seríamos infinitamente felices si lo recuperásemos! Supongo que incluso cuando empeoramos nuestra situación, nos queda algo bueno: apreciamos realmente lo que hemos conseguido... y después perdido. Espero que cuando lo volvamos a recuperar nos acordemos de lo mucho que lo hemos deseado cuando estaba lejos. En fin, las personas hacemos lo que podemos.

Aviso

Pienso escribir todas las tonterías y todos los pensamientos absurdos que ronden mi mente. A ver si es posible que os hagais una idea de cómo funciona mi cabeza. Es una invitación al mundo caótico que me he montado sin querer. Incluso puede que me ordene un poco. Nada más.